Las aulas vacías de ayer confirman las expectativas de los sindicatos, que esperaban que el segundo día tuviera también un seguimiento mayoritario en un sector muy ideologizado y dividido, ahora unido a causa de un extendido descontento. "Han conseguido cabrear hasta a los suyos", resumen Carlos Herrán, profesor desde 1977 y director del instituto público Gran Capitán, de la capital, en referencia al enfado que el Gobierno de la Comunidad, del PP, ha causado entre los docentes de la escuela pública, incluidos sus simpatizantes.
Al margen del paro laboral, los sindicatos han llevado a cabo una nueva protesta para hoy.
Si el martes 20 por la tarde fue una gran manifestación la que recorrió las calles de la capital -a la que asistieron 41.400 personas, según calculó EL PAÍS; apenas 5.000 según Educación, 90.000 personas según los sindicatos; y más de 20.000, según fuentes policiales- a las seis y media de ayer por la tarde una cadena humana ha rodeado la Consejería de Educación, situada en la calle Alcalá.
Cientos de profesores han cortado la calle mientras le daban su "abrazo".
También se han llevado a cabo distintas concentraciones por la mañana en las delegaciones de Área Territorial de la Comunidad de Madrid.
Mientras tanto, Educación ha tendido la mano a los huelguistas. Su titular, Lucía Figar, ha considerado esta mañana "razonable" retomar el diálogo "en los próximos días" con los sindicatos, al tiempo que ha cifrado en cerca de un millar de interinos no serán contratados para este curso.
La presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha sido sin embargo dura con los docentes. "Desde mi punto de vista", les ha dicho Aguirre, "pasar de 18 a 20 horas lectivas no es ni mucho menos para privar del derecho a la educación" a miles de alumnos madrileños. "Que no se confunda a la opinión pública, aquí no ha habido recortes de ningún tipo", ha sentenciado Aguirre, para añadir que, "con la que está cayendo en España, es una obligación moral para todas las administraciones" tomar medidas de ahorro.
Desde la oposición, el diputado del PSOE Rafael Simancas ha exigido al líder del PP, Mariano Rajoy, que "desautorice inmediatamente los gravísimos recortes" en educación que están haciendo los gobiernos autonómicos del PP, o será "cómplice activo" del "mayor ataque" a la enseñanza pública de la democracia. El diputado socialista ha denunciado los recortes en esta materia, los "desvíos de fondos e incluso suelo público" hacia la enseñanza privada y los despidos de profesores, así como la "amenaza explícita al fin de la gratuidad", en alusión a las palabras de Aguirre.
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